Ortiga Menor y Mayor
Urtica urems, L. y U. dioica, L.
CaracterÃsticas
La ortiga es una planta conocida por todos como inútil y hasta como perjudicial y sin embargo desempeña, en la economÃa universal, un gran papel. No nos detendremos mucho en su descripción.
Es perenne, el tallo (en la ortiga mayor) alcanza a veces más de un metro, las hojas son opuestas, acorazonadas, alargadas y agudas, dentadas; las espigas son paniculadas y colgantes.
La ortiga mayor se cultivaba, tiempo atrás, para hilar y tejer sus fibras como las del lino.
Los brotes tiernos de la ortiga mayor son un excelente alimento, muy sano y estomacal, y se preparan lo mismo que las espinacas, sazonándolos con aceite y manteca o mantequilla.
Uso medicinal
a. Es urticante, y sus picaduras se pueden aprovechar para producir una irritación en la piel del cuerno humano cuando está afectado por reumatismo o parálisis. Puede substituir, en este caso, a los vejigatorios y sinapismos.
Tomada en infusión, es diurética y astringente, excelente por tanto en las hemorragias, ya sean internas o de la nariz o boca. Bastan algunas gotas del jugo de ortiga para estancar la hemorragia producida por la picadura de las sanguijuelas.
El cocimiento de ortiga es útil contra la hidrocefalia (agua en el cerebro). Es, además, antiséptico y detersivo. La dosis es una buena pulgarada para una taza de agua. El agua en la cual se ha cocido la ortiga es excelente para preparar sopas y caldos en vez de usar agua común.
La ortiga es pectoral: limpia los bronquios y pulmones de flema, cura la tos y preserva de los resfrios.
Contra la tos y afecciones pulmonares en general se toma una buena pulgarada de ortiga con otras de hinojo y llantén, para una taza de agua, varias veces al dÃa.
La ortiga purifica la sangre; para ello se toman, 3 veces al dÃa, entre 4 y 6 cucharadas grandes de la combinación ortiga hipéricomilenrama.
Para preparar el aceite de ortigas, muy bueno para las erupciones en la cabeza, se cortan las raÃces de ortiga en pedacitos menudos, se machacan, se echan en un frasco con aceite de olivos, se pone al sol o en lugar caliente; a las pocas semanas quedará listo para ser usado.
La ortiga nos da también un remedio para los cabellos. Se echa vinagre sobre las hojas desecadas y se dejan macerar algunas semanas. Con esta preparación se lava la cabeza tres o cuatro veces al dÃa. Asà se detiene la caÃda, y brotan otros cabellos.
Si se quiere emplear la raÃz para este objeto, se toman dos terceras partes de agua, un tercio de vinagre y 200 gramos de raÃz, se deja en cocimiento por media hora y se lava la cabeza con la infusión resultante.
Si las raÃces de los cabellos no están muertas, puede crecer el pelo de nuevo. En general, se puede confiar en la cura cuando el cuero cabelludo se conserva áspero y con caspa, pero deben perder la esperanza los que por la caÃda del cabello su cabeza queda resplandeciente y lustrosa como la corteza de una sandÃa.
El efecto del lavado que aconsejamos es tanto más notable, si a la ortiga se añade raÃz de bardana.
Diremos finalmente, que la ortiga cura la hidropesÃa y detiene la diarrea.
Sin embargo, la ortiga mayor es algo laxante.